29 diciembre 2008
como comprar en los zocos
Todo ha de ser teatral, se ha de fingir que uno se va malhumorado por no conseguir el precio apetecido. Se ha de admitir que el vendedor le coja del brazo con fuerza y no le deje ir. Y si al final uno consigue un precio ventajoso a de atribuir a ese teatro del regateo el que el vendedor lo despida con cajas destempladas. Si lo despide muy efusivo y con deseos de que vuelva, se puede sospechar que ha pagado más de lo que el propio vendedor esperaba.
Tampoco hay que amargarse por ésto. A veces se llega a situaciones que para nosotros son absurdas, como estar regateando denodadamente por 50 dirham sin darnos cuenta que esa cantidad equivale a 5 euros.
Pero cuando se ha llegado a ese precio que uno cree tan ventajoso es cuando empiezan los verdaderos peligros. Si no tiene billetes pequeños, el vendedor le hará una oferta irresistible. En vez de cobrarle 150 dirham por la tetera le dará dos por 250. Se sigue teniendo necesidad de cambios y el vendedor, no se sabe como, le cogerá o le pedirá esos 50 euros que le ha visto en la cartera para traerle amablemente cambios. Está perdido. Al final se mezclaran en la transacción comercial dirhams y euros, el vendedor hará unos juegos malabares al darle las vueltas y usted se ira con las dos teteras y el convencimiento de haber sido engañado.
Lo mejor de todo es que nunca sabrá, aunque mire en su cartera, cuanto le costaron esas dos teteras, que como no se tome con humor lo sucedido, siempre harán para usted un té muy amargo.
18 diciembre 2008
biblia y fecundación
La Iglesia debe dedicarse a trasmitir a sus fieles las enseñanzas de Jesucristo y predicar con el ejemplo. En lo que se refiere a la ejecución de personas no ha tenido ningún empacho en ser la primera en llevarla a cabo y en bendecir la pena de muerte, la guerra, y a los más sanguinarios dictadores del siglo XX, algunos de ellos de comunión diaria, para que nos venga ahora con estas contradicciones. Compara el aborto con los exterminios nazis, sin acordarse lo tibia que estuvo en aquellos tiempos con Hitler.
El problema con su particular verdad, que comentas, es que según la propia Iglesia se trata de la Verdad Absoluta. Y este es su pecado, pecado capital de orgullo. Ya cuando Jesús fue presentado a Pilatos, que no era lo que nos han hecho creer, poco le importa a la Iglesia la verdad, le preguntó.
– Y tú ¿quién eres? –a lo que Jesús contestó.
– Ego sum veritas. Yo soy la verdad. Me pregunto que pensaría cualquier romano ilustrado presente ante aquella respuesta. Pilatos replicó.
–Qui est veritas?
¿Qué es la verdad? Para el Maestro, él era la verdad, para un romano ilustrado existía la verdad socrática, la aristotélica, la platónica, la epicúrea, etc. Para la Iglesia la verdad es la suya, puesto que es la verdad revelada. Pero hay un pequeño problema en esa revelación y es que solo la Iglesia Católica puede interpretarla. Una Biblia católica se distingue de una protestante en que la primera tiene a pie de página la "recta" interpretación de los textos. Parece como si las personas fueran menores de edad y los embriones fueran personas.
La Iglesia no evita pasar por el peliagudo trance de determinar si el feto es persona. Yo entiendo que afirma que desde el momento de la fecundación, el cigoto ya es persona, pues su destrucción es un asesinato.
¿Cuál es el mensaje de la Biblia sobre el hecho de la fecundación? Inútil buscarlo en la Biblia. En este, como en otros casos, la Biblia ignora qué es la fecundación. Debieron pasar muchos siglos, hasta que la ciencia informó a los hombres de este hecho.
17 diciembre 2008
personas y naturalezas
15 diciembre 2008
años ñoños
11 diciembre 2008
bolonios 2
10 diciembre 2008
bolonios 1
09 diciembre 2008
zocos de marrakech
Primera incursión en el zoco. El zoco en realidad son zocos y cuya extensión es como el de una pequeña ciudad dentro de la medina. Los pasadizos y callejuelas oscilan entre metro y dos metros de anchura. El hecho de ser cubiertos y el de avanzar por ellos, cuando se puede, hombro con hombro aumenta la sensación de agobio. Las calles son más anchas, llegan a tener tres metros. Por ellas circulan motocicletas, bicis, borriquillos con su carga o tirando de un carricoche y personas que empujan sus carros de mano.
De aquí si que pensamos que jamás podríamos salir. Las callejuelas de Sidi Mimoun eran un juego de niños comparado con esto. Pero al final siempre se termina en Jema el Fnaa.